Anteriormente, hemos tratado la profesión enfermera en un sentido más amplio y la relación de la promoción de la salud a través de las nuevas tecnologías. En esta parte de la entrevista con la enfermera Montserrat Bayego nos centraremos en el ejercicio libre de la profesión. Dado que cada vez son más las personas que desde la Enfermería deciden emprender. Vamos a conocer mejor el proceso de emprendimiento: cómo surgen los proyectos, qué dificultades existen para darlos a conocer y con qué herramientas cuenta el COIB para acompañar a las emprendedoras en todo el proceso.

Si quieres saber más sobre Montserrat Bayego y las enfermeras te recomendamos que no te pierdas las otras entradas de la entrevista: “La enfermera donde está ‘humaniza’‘” y “El camino de la innovación sólo tiene sentido si se tienen en cuenta todas las franjas de población.”

B. Seguimos con Montserrat Bayego conociendo más sobre la Enfermería. Entramos en el mundo del emprendimiento. ¿Cada vez hay más enfermeras que optan por el ejercicio libre?

MB. Sí, por distintos motivos. Algunas porque acaban la carrera y desean ofrecer sus servicios directamente a la población, sin entrar en la dinámica de primaria o hospitalaria, tanto pública como privada. Otras porque llevan un tiempo trabajando contratadas y se dan cuenta de que en muchos momentos querrían hacer las cosas de otro modo y no se les permite.

B. Y, ¿por qué no se puede dentro del sistema?

MB. Como enfermeras, lo que hacemos es detectar necesidades para dar una respuesta de salud adecuada. A menudo, la enfermera se encuentra que dentro del sistema existen dificultades para dar la respuesta que considera oportuna en determinadas situaciones. Esto genera que surja la idea de emprender en proyectos propios desde la Enfermería. Evidentemente, este no es el único motivo que genera ideas emprendedoras.

B. ¿Existen otros perfiles de enfermeras emprendedoras?

MB. Sí, en los tiempos que corren también existe la enfermera que desgraciadamente se ha quedado sin trabajo. Y, si esta enfermera tiene una idea interesante, es una oportunidad para llevarla a cabo. Entonces, esta enfermera pasa de no tener trabajo a generar su modo de ganarse la vida.

B. ¿Es fácil dar el paso de trabar para terceros a ser tu propio “jefe”?

MB. No, no es fácil cambiar el chip. Pasar de ser asalariado a ser tu propia dirección, tu gerencia, etc. Tener que empezar a ocuparte de la publicidad, de dar forma a tu idea de negocio o de servicio. Tienes que hacer un cambio y desde el COIB se acompaña a las enfermeras en este proceso.

B. ¿Cómo es este acompañamiento?

MB. El Col·legi Oficial d’Infermeres y Infermers de Barcelona (COIB) ha editado una guía que reúne todo lo que el COIB ofrece para acompañarlas. En este acompañamiento se hace hincapié en todo lo que significa ser enfermera emprendedora.

B. ¿Tienen ADN emprendedor las enfermeras?

MB. Sí, y lo estamos demostrando cada vez más. Se tiene que tener en cuenta de la situación que se partía. Tradicionalmente, desde la Universidad se priorizaban las salidas profesionales ligadas al hospital o la primaria, en diferentes ámbitos y especialidades. Con los años, alguna enfermera llegaba a la docencia y a la gestión. Como consecuencia de las situaciones que hemos comentado, se han abierto camino enfermeras que se plantean el ejercicio libre. Así, cada vez se ha ido generando una mayor motivación para transformar todas las competencias que la enfermera ha adquirido en la carrera en proyectos enfocados a determinados nichos sociales. Y, esto puede ser una salida profesional. Un trabajo creado por uno mismo.

B. Y, ¿qué puede hacer una enfermera?

MB. Todo. Una enfermera lo puede hacer todo siempre y cuando se mantenga dentro de sus competencias.

B. ¿Todo?

MB. Claro, desde ideas de servicio de atención directa a pequeña escala, como llevar a cabo un programa de atención domiciliaria. Hasta ideas macro, que sorprenden a personas que no conocen las competencias de las enfermeras. Porque la enfermera lo que hace es cuidar de toda la sociedad y tiene capacidad para generar cuidados en cualquier ámbito social.

B. En este sentido macro, ¿puede intervenir más allá del sector sanitario?

MB. ¡Y tanto! Se tiene que tener en cuenta que la enfermera está acostumbrada a observar necesidades, a detectarlas, a nivel holista. Es decir, tanto a nivel personal como a nivel grupal. Por lo tanto, puede detectar también necesidades en una empresa, en un grupo social, y puede dar respuesta a estas necesidades de forma colectiva. La enfermera siempre genera grandes e importantes ideas, es una gran inventora.

Lo que realmente funciona es la confianza

B. Uno de los nuevos aspectos que debe hacer la enfermera cuando emprende es darse a conocer. ¿Cómo puede darse a conocer la enfermera?

MB. Pues con toda aquella capacidad que tenga para generar sus herramientas de marketing. Que no es fácil. Además, ahora se tiene que sumar la presencia en la red, a lo que tradicionalmente era un tríptico o una tarjeta en papel. Vivimos en una sociedad que a nivel virtual es una selva, donde siempre habrá alguien que sabrá posicionarse mejor. Así que tienes que intentar destacar, mostrar tu plus.

B. Desde tu experiencia, ¿qué aconsejarías?

MB. En definitiva, en mi caso, con más de 25 años de recorrido de ejercicio libre, aunque hay determinados intentos de publicidad, que nunca nos han servido para nada, los hemos ido probando e incluso repitiendo, porque entendemos que tenemos que estar. Como por ejemplo publicidad en las publicaciones de proximidad. Pero tenemos claro que cuando hablamos de enfermeras estamos hablando de servicios de confianza. Y, lo que realmente funciona es la confianza, por tanto el boca-oreja.

B. ¿Cómo se traduce?

MB. Cuando has conseguido hacer una clientela, la fidelizas porque le has sido útil, le has podido ayudar, ha encontrado un trato diferente. Lo que sucede es que estas mismas personas a las que has ayudado son las que te recomiendan. Es un trato de confianza. Esto se debe a que tenemos entre manos un tema muy serio: la salud de las personas y el conocimiento que estas desean adquirir para cuidarse.

La enfermera debe tener la capacidad de generar red

B. ¿Esta confianza también se traduce en recomendaciones entre profesionales?

MB. Sobretodo se da cuando se entra en red con otros profesionales. Por ejemplo, cuando después de haber establecido una relación de ayuda con una persona, se llega a la conclusión que quiere unos recursos determinados que no le puedo ofrecer directamente, como la acupuntura, lo que si que puedo es recomendarle un profesional de confianza reconocida que pueda ofrecerle este tratamiento.

O, pongamos otro ejemplo, si un día viene una persona, con la que se ha establecido una relación de confianza, para comunicarme que quiere probar otro centro. Le animaré a que me comente cómo le ha ido en el nuevo espacio y a que cuando lo considere, si quiere, vuelva a visitarnos. Porque es la persona quien manda. La enfermera debe tener la capacidad de compartir conocimiento con sus colegas, de generar red, de generar conocimiento para derivar. La enfermera no debe tener ningún miedo y tener mucha sinceridad y confianza y capacidad de aceptar que es la persona la que tiene que decidir dónde busca sus respuestas de salud en cada momento.

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